Por qué no basta con solo beber agua
Sabemos que entrenar con constancia, descansar bien y cuidar la alimentación son piezas clave para mejorar el rendimiento físico. Pero hay un factor que a menudo pasa desapercibido, y que puede marcar la diferencia entre una buena sesión y una llena de fatiga, calambres o bajones de energía: la hidratación.
Cuando sudas, pierdes más que agua
Cuando entrenamos, especialmente si entrenas en ambientes calurosos o con alta intensidad, tu cuerpo pierde más que agua. Pierdes electrolitos esenciales como sodio, potasio o magnesio, que son clave para funciones musculares, nerviosas y metabólicas.
Beber agua es fundamental, sí. Pero en determinados contextos, el agua sola no basta.
¿Qué pasa cuando no nos hidratamos correctamente?
- Fatiga temprana y bajón de energía durante el entrenamiento.
- Aparecen calambres musculares y menor coordinación.
- Tiempo de recuperación más largo tras el ejercicio.
- Mayor riesgo de lesiones.
Y algo muy importante: la sed aparece cuando ya hay un grado de deshidratación. Por eso, no deberías esperar a tener sed para beber.
Hidratación estratégica: cómo hacerlo bien
Si eres una mujer activa o deportista, necesitas una estrategia de hidratación que se adapte a tu tipo de entrenamiento. Aquí te dejamos algunas recomendaciones:
- Hidrátate antes, durante y después del ejercicio.
- Elige opciones que ayuden a reponer tanto líquidos como electrolitos.
- Ten en cuenta factores como la duración del esfuerzo, tu nivel de sudoración y la temperatura ambiental.
Bebidas isotónicas: la mejor opción para rehidratarte bien
Nuestras bebidas isotónicas están diseñadas para reponer de forma efectiva los líquidos y minerales perdidos durante el ejercicio.
- Isotonic Drink Neutro: Sin sabor, ideal para tomar solo o combinar con fruta o zumos. Hidratación funcional sin añadidos innecesarios.
- Isotonic Drink Limón: Refrescante y con sabor natural a limón. Sin edulcorantes artificiales, perfecta para recuperar tras entrenamientos exigentes.
La hidratación es una parte del rendimiento.
Escucha a tu cuerpo. Anticípate.
Apuesta por fórmulas que realmente te ayuden a rendir al 100%.